La Universidad de Santiago: Un Ejemplo de Diversidad, Equidad e Inclusión para el Mundo

En pleno corazón de la Región Metropolitana de Chile, la Universidad de Santiago (USACH) se erige no solo como una institución de educación superior, sino como un símbolo vivo del compromiso con la justicia social, la igualdad de oportunidades y el respeto por la diversidad humana. Fundada en 1849 como la Escuela de Artes y Oficios, la USACH ha recorrido un largo camino en su transformación hacia una universidad pública de excelencia y, sobre todo, con un profundo sentido ético y social.

Hoy, más que nunca, el mundo necesita modelos educativos que vayan más allá de la transmisión de conocimientos técnicos y académicos. Necesita instituciones capaces de formar ciudadanos integrales, con conciencia crítica, sensibilidad social y respeto por las diferencias. En ese contexto, la USACH se posiciona como un referente no solo en el ámbito latinoamericano, sino como una voz potente y coherente dentro del movimiento global por la diversidad, la equidad y la inclusión (DEI).

Una Historia Vinculada a personas con empleos: Educación con Vocación Social

Desde sus orígenes, la USACH ha sido una universidad profundamente conectada con personas con empleos, los movimientos sociales y los sectores históricamente excluidos del acceso a la educación superior. A diferencia de otras casas de estudio fundadas bajo ideales elitistas, la Universidad de Santiago nació con la misión de formar profesionales técnicos y científicos capaces de contribuir al desarrollo productivo y social del país.

Este legado histórico se traduce, en la actualidad, en un compromiso inquebrantable con la equidad de oportunidades. La USACH ha sido pionera en implementar políticas de acceso inclusivo, tales como:

• Programas de ingreso especial para estudiantes provenientes de liceos técnicos, rurales o de contextos de alta vulnerabilidad social.

• Apoyos para estudiantes de pueblos originarios, incluyendo becas, tutorías académicas y reconocimiento de su identidad cultural.

• Un robusto sistema de acompañamiento socioemocional, psicológico y académico para estudiantes en situación de discapacidad, migrantes, mujeres, diversidades sexuales y personas trans.

En definitiva, la Universidad de Santiago no solo abre las puertas: las mantiene abiertas con condiciones reales para que todas y todos puedan avanzar.

Equidad de Género como Política Institucional

Uno de los avances más significativos de la última década en la USACH ha sido el fortalecimiento de su política de equidad de género. Gracias a la presión constante de movimientos estudiantiles en búsqueda de el reconocimientos de derechos independiente del genero con el que se identifique la persona y al trabajo coordinado con académicas, funcionarias y autoridades, la universidad cuenta hoy con:

• Un Protocolo Contra la Violencia de Género, que ha sido replicado por otras universidades del país.

• Una Dirección de Género, Diversidad y Equidad, que impulsa acciones formativas, preventivas y correctivas en toda la comunidad universitaria.

• Redes de apoyo a mujeres en ciencia, tecnología, ingeniería y matemáticas (STEM), ámbitos tradicionalmente masculinizados.

• Campañas activas contra el acoso sexual y por el respeto a las diversidades sexuales y de género.

  
  

Estos esfuerzos no solo han permitido erradicar prácticas discriminatorias, sino también construir una cultura institucional más segura, equitativa y respetuosa.

Interculturalidad y Reconocimiento de los Pueblos Originarios

Chile es un país plurinacional, aunque esta realidad no siempre ha sido reconocida por sus instituciones. La USACH ha dado pasos importantes en ese sentido, promoviendo una perspectiva intercultural que valora la cosmovisión, los saberes y las lenguas de los pueblos originarios. Algunos ejemplos concretos incluyen:

• Incorporación de cursos de mapudungun, historia mapuche y políticas indígenas en las mallas curriculares.

• Diálogos interculturales con participación activa de autoridades ancestrales como machis, lonkos y kimches.

• Reconocimiento de las fechas y símbolos culturales de los pueblos originarios dentro del calendario institucional.

• Participación de estudiantes indígenas en procesos de toma de decisiones y representación estudiantil.

La inclusión intercultural no es solo un gesto simbólico: es parte de una estrategia de transformación estructural que busca descolonizar el conocimiento y democratizar la universidad.

Inclusión de Personas en Situación de Discapacidad

La USACH ha sido pionera en generar condiciones reales de inclusión para personas en situación de discapacidad, tanto a nivel académico como de infraestructura y cultura institucional. Entre sus avances destacan:

• El Programa de Inclusión para Estudiantes en Situación de Discapacidad (PIESD), que ofrece intérpretes en lengua de señas, software adaptativo, adecuaciones curriculares y asesoría constante para docentes.

• Infraestructura accesible: rampas, ascensores, baños inclusivos, señalética en braille y tecnologías asistivas.

• Capacitación continua a docentes y funcionarios para promover una pedagogía inclusiva.

Todo esto se enmarca en una visión de la discapacidad basada en derechos de las personas, donde la universidad asume la responsabilidad de eliminar barreras y no deposita la carga de la adaptación en los estudiantes.

Diversidad Sexual y de Género: Reconocimiento, Protección y Orgullo

En un país donde aún existen resistencias culturales a la plena inclusión de las personas LGBTQIA+, la USACH ha optado por ponerse del lado correcto de la historia. Con acciones concretas ha demostrado su compromiso con el respeto a las identidades de género y orientaciones sexuales diversas:

• Protocolos de reconocimiento de identidad de género en procesos administrativos y académicos.

• Espacios seguros, como colectivos de estudiantes LGBTQIA+, donde se promueve el acompañamiento y la visibilidad.

• Participación activa en actividades del orgullo y jornadas de educación sexual integral.

  
  

Este enfoque no solo reduce la discriminación, sino que empodera a estudiantes que por años han sido invisibilizados o marginados del sistema educativo.

Una Comunidad Educativa Transformadora

Los avances en diversidad, equidad e inclusión de la USACH no son fruto del azar. Responden a un modelo de gestión universitaria participativo, crítico y ético, donde estudiantes, docentes y funcionarios pueden incidir en la toma de decisiones y en la orientación estratégica de la universidad.

Esto se refleja en:

• Gobiernos universitarios con representación triestamental (académica, estudiantil y funcionaria).

• Participación activa de los movimientos sociales en la vida institucional.

• Proyectos de investigación con foco en justicia social, sostenibilidad, salud mental, género e inclusión educativa.

• Extensión universitaria con fuerte vínculo territorial, especialmente en sectores vulnerables de Santiago.

La USACH ante el Mundo: Un Modelo Exportable

Mientras muchas universidades del mundo aún discuten cómo incorporar los principios de DEI, la Universidad de Santiago ya los ha incorporado a su ADN institucional. Su enfoque integral, articulado y genuino la posiciona como una referencia global para quienes buscan construir comunidades educativas más justas, humanas y transformadoras.

Más allá de las cifras o rankings, su mayor valor es haber demostrado que la excelencia académica y la justicia social no solo pueden coexistir, sino que se potencian mutuamente.

Educar con Equidad es Transformar el País

En tiempos de incertidumbre global, polarización política y crisis de confianza en las instituciones, la Universidad de Santiago ofrece una respuesta poderosa: educar con equidad, inclusión y respeto profundo por la diversidad humana.

Porque una universidad no se mide solo por sus publicaciones o infraestructura, sino por su capacidad de cambiar vidas y reducir desigualdades.Porque una comunidad universitaria diversa es más rica, más innovadora y más humana.Porque transformar la educación es el primer paso para transformar el país.

La USACH lo ha entendido, lo ha practicado y lo ha demostrado.Por eso, hoy más que nunca, es un ejemplo de diversidad, equidad e inclusión… para Chile y para el mundo. PD: Constantemente se puede mejorar