Búsqueda de talentos en Antofagasta: un gran desafío
- Santiago Toledo Ordoñez
- 29 jun 2024
- 2 Min. de lectura

En medio del extenso y desafiante desierto de Atacama, en la región de Antofagasta, me enfrenté a un dilema que puso a prueba mi experiencia en el campo de la adquisición de talentos. Me habían encomendado la tarea de encontrar un perfil clave para las operaciones de la empresa, pero la búsqueda parecía estar inmersa en un silencio ensordecedor, sin métricas claras ni antecedentes concretos que me guiaran, además de un retraso de más de un año en la respuesta a la solicitud.
A pesar de la confianza de mi jefe en mis capacidades, cada entrevista y cada publicación parecían desvanecerse en un mar de incertidumbre. Ni siquiera la ayuda de un consultor externo podía despejar las sombras que oscurecían el camino hacia una solución. Fue entonces, en un pasillo solitario, tras un mes sin resultados, cuando encontré un rayo de esperanza en las palabras de la directora de RR.HH., después de acercarme a ella y contarle el panorama.
Con una promesa de apoyo y acción, se abrió una puerta a una solución inesperada. La respuesta no era la desesperación, sino la colaboración y la acción conjunta. Convocamos una reunión estratégica entre los distintos pilares del equipo de RRHH, teniendo en cuenta las especificidades de la región y del mercado laboral. Fue un acto de equidad y justicia, una respuesta a la necesidad de adaptarse al entorno y a las demandas de talento de la región. Y así, con un ajuste del 22% en el alquiler ofrecido, el rompecabezas quedó finalmente resuelto. El proceso, aparentemente interminable, se completó 2 semanas después, y el puesto clave encontró a su ocupante ideal. En medio de la incertidumbre y la adversidad, demostramos que con colaboración y determinación se pueden superar hasta los retos más insuperables.
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